El vaquero

La mierda le cayó en la cara. Llevaba el sombrero nuevo que le habían regalado dos días antes en su cumpleaños número dieciséis. David tenía ya edad para ir con sus hermanos mayores al arreo y en ese momento todos ellos se reían de él mientras el sombrero absorbía el aroma.

—Agradece que Dios es sabio y los elefantes no vuelan —dijo su tío Jacob mientras le pasaba un pañuelo—. Los Mexicanos dicen que es de buena suerte.

—¿Cómo puede ser de buena suerte que una vaca te cague en tu primer día?

Para David aquello no estaba saliendo como esperaba. Escuchó el silbido y cerró los ojos anticipando otro impacto. Luego, el característico sonido de un mojón de medio kilo golpeando un sombrero. David no sintió el golpe mientras todos, nuevamente, se reían.

—Que una vaca te cague en tu primer día es mucho menos humillante que cuando una vaca te caga después quince años trabajando en el rancho, ¿verdad, Jacob?

David abrió los ojos. Su tío reía a carcajadas mientras se limpiaba la mierda del  hombro. David le devolvió el pañuelo. Su padre había llegado junto con el señor S de cortes Santa Rita. El hombre, cuyo apellido se limitaba a una letra, tenía un hijo llamado Dan el cual estaba involucrado con su hermana Eliza. En cuanto él terminara la universidad, regresaría para casarse con ella y toda la familia se burlaba de cómo Eliza Sanders pasaría a ser Eliza S. Fuera de eso, había pocos detalles negativos que se pudieran decir de la familia S.

—Hoy viajarás en la avioneta de tu tío. Legalmente, no tienes edad de pilotear, pero todos sabemos que eres bueno con el lazo.

Su padre había tenido la cortesía de enviarlo con su tío en lugar de con sus hermanos. Cualquier error que cometiera con Dewey o Joss se mencionaría en la mesa del comedor, pero lo que ocurriera con su  tío, se quedaría en la cabina.

Las hélices tableteaban con su característico ritmo cuando vieron a una vaca parda con una única mancha blanca en culo. El animal volaba en una dirección diferente al rebaño, cosa que no sorprendió a Jacob.

—Lasa a la «Parda». Esa vaca todos los días se separa en dirección de un cúmulo donde murió una amiga suya. Si sigue haciendo esas visitas, ella también va a morir allí. Dos avionetas no bastan para sacar a una vaca de un cúmulo de baja presión, cuando tenía tu edad…

—¡Parda atada!

—Perfecto, Daniel. —Jacob cerró el micrófono solo para la línea privada. —Se ve que eres bueno para el oficio pero ¿no has pensado en ingresar a la universidad en un par de años?

—No sé, mi papá y los abuelos dicen…

—¿Que ir a la universidad no sirve de nada para hacer nuestro trabajo? ¿Que yo fui a la academia de aeronáutica y tu padre sigue siendo mejor vaquero?

—Yo no quería decirlo así.

—Tu padre y tus abuelos lo dicen de varias maneras diferentes, pero lo más doloroso es lo que no dicen

—¿Vamos a perder el rancho?

—Yo sabía que no eres tonto. Tu padre no puede pagar a empleados y tampoco puede pagar a un mecánico. ¿Sabes lo que gana un mecánico de aeronaves en El Paso o en Tucson?

David tenía una idea de cuánto cobraba su tío por reparaciones a los vecinos y cuánto pagaba su padre por ellas.

—No, pero si es más dinero, ¿por qué te quedas?

—Eres inteligente, David. Ya lo sabes.

—Pero… ¿Por qué están todos tan tranquilos?

—Tu padre está convencido de que Eliza va a salvar el rancho.

—Es casi cómo regalarle las tierras al señor S.

—Pagará por ellas. Tu madre se iba a casar con el señor S al volver de la universidad. El padre del señor S y tu abuelo también eran amigos. Un día de acción de gracias, Humbert S llegó al pueblo con una amiga de la universidad y ya sabes el resto de la historia.

—Si yo fuera mecánico tampoco podría salvar el rancho.

—Sálvate a ti, chico. Ve a la escuela, aprende algo útil y cuando todo se caiga, al menos podrás sostener a tú  esposa y pagar el asilo de tus padres.

David conocía a sus hermanos, odiaban a los pule-gafas. Estaban convencidos de que este rancho sería su vida y que la vida nunca cambiaría.

La plática se interrumpió cuando vieron a su padre y al señor S tratar de liberar a una vaca de un cúmulo de baja presión. Cuando la vaca se liberó, salió disparada hacia la avioneta que ambos tripulaban.

En un silencio espectral, el mejor vaquero de Nuevo México y el dueño de cortes Santa Rita se desplomaron hacia un prado.

Ahora el destino del rancho era aún más incierto y David lo sabía.

Nota del cerdo:

La entrada de hoy es una edición especial de la revista Insectos comunes, el reto en cuestión es imaginar un mundo donde las vacas vuelan ¿por qué no visitan los enlaces y leen otras versiones? Si les gusta pueden ayudar a un escritor hambriento (de poder y manzanas) y compran la revista.

Otras versiones:

El zumbido de las vacas voladoras by Benajamín Rechaca

¿Y si las vacas volaran? by Toni (Autonomía)

¿Donde están las vacas? by La rata gris

Una declaración en Banculte by Manu LF

Todos los cráneos del presidente.

La primera vez que lo vi, sucedió enfrente de una gasolinera, al principio pensé qué se trataba de una exageración de campaña, pero al día dos desde la toma de protesta pude observar los cuerpos mientras eran arrastrados por un camión de trasporte público.

Los troncos inertes estaban amarrados de los tobillos a la defensa trasera del autobús, hacía tiempo qué el polvo se había acumulado en la herida del cuello generando una costra marrón donde deberían estar las cabezas. Apenas ayer habían comenzado las protestas por los resultados electorales y el sindicato de trasportistas fue el primero en reclamar. Fue una cosa horrible pero no la peor.

A su segundo año de gobierno mi esposa me comentó como si se tratara de un chisme del espectáculo:

—¿Sabes? Dicen qué van a hacer una expansión a su habitación, colocarán una cúpula de cuatro metros de altura con nichos para colocarlos.— Clarisa se levantó y revisó detrás de la puerta, buscar intrusos en la casa se había vuelto una costumbre rutinaria, lo hacía casi sin pensar.

—¿Quién te dijo tremenda idiotez?— Pregunté en un tono sobre-actuado por sí alguien estaba escuchando mi conversación matutina.

—Fue mi hermana, Leticia, su marido es ingeniero civil y está encargado de la obra.— Me dijo mientras verificaba que no hubiera objetos sospechosos instalados en nuestra ventana.

—Tendré qué hacerle una visita a mi cuñado. —Dije mientras me servía cereal y verificaba qué no hubiera nada en la caja ni la alacena.

—No pensarás en denunciarlo ¿Verdad?

—El no ha hecho nada ilegal, el presidente dijo qué lo haría, y es normal sentirse orgulloso de una obra de dicha envergadura.— Dije desde debajo de la mesa, tomé un enorme cuchillo de cocina, lo oculté en mi sudadera y salí a mi trabajo.

Mi cuñado me dejó entrar a la obra, me prestó un casco blanco de personal financiero y un  chaleco naranja con bandas reflejantes, nadie verificó los bolsillos de mi sudadera.

—Desde qué saben qué estoy en esta obra todos vienen a pedirme qué les muestre la habitación.

—¿Y al personal de seguridad no le molesta qué traigas invitados a ver la habitación del presidente?

—¡Nah! Tienen sus métodos para prevenir atentados, además parte del proyecto es convertir el lecho presidencial en un sitio turístico.

—¿Quieres decir qué esperan que la gente pague y haga filas para ver los… tu sabes… esos?— Señalé con mi dedo.

—Pues tu mismo has venido, además hay cientos de ciudadanos qué tienen la misma curiosidad qué tu. ¡Vamos! —Dijo mientras me arrastraba al interior de la famosa habitación. —Todos deberíamos de verlo por lo menos una vez en la vida.

—Será un espectáculo morboso que raya en el propaganda política. ¿Dónde está el buen gusto? —Le dije mientras veía las puertas que se instalaban para el acceso de los turistas, la habitación del presidente sería la única abierta al público, y ya se estaban instalando bandas similares a los parques de diversiones.

—¿Buen gusto? — Mi cuñado sonrió de forma histérica. —¡Es de terrible gusto! De hecho desde su campaña demostró tener un horrible gusto, pero mira lo qué ha hecho. —Señaló un mural nacionalista justo donde se instalarían las taquillas. —El segundo país más seguro del mundo, no hay casi crímenes y los qué hay se castigan, no hay pobres en el país, todos tenemos casa propia. —En ese momento lo tomé del hombro para interrumpirlo.

—¿No te has preguntado quien vivía en tu enorme casa antes de qué la compraras a ese ridículo precio a mensualidades? —Mi cuñado se retiró la mano del hombro y gritó con gusto:

—Obviamente a algún cretino qué se lo merecía. ¡No importa! Él está haciendo su parte y nosotros la nuestra, todo es mucho mejor con él, sabes qué no es propaganda, es autentica acción, tu puedes recordarlo ¿No estamos mejor ahora?

Podía sentir como mi voluntad se desquebrajaba.

“Nuestra parte” tenía un peso increíble, comencé a sudar debajo de mi casco, ¿Realmente el presidente estaba cumpliendo con su enferma propuesta de campaña? Si mi cuñado había comprobado que él cumplía, probablemente nosotros deberíamos hacer nuestra parte aunque eso implicara unirme a “esos”

—¿Pero están realmente allí?

—¡Por supuesto qué lo están! todos allí a la vista desde su cama, todas las noches espero junto con el equipo del servicio secreto mientras verifican la seguridad del sitio, lo he visto; se acuesta en su cama debajo de ellos. —Me mostró una placa con letras de bronce sobre concreto colado. —Fue mi idea poner sus slogans en la puerta de la habitación, yo quería algo llamativo pero el dio la orden de algo discreto y directo.

—Tú haces tú parte y yo hago la mía. —Leí en voz baja.

—Es más fácil hacer nuestra parte cuando sabes qué el criminal será castigado. —Mi cuñado estaba a punto de darme acceso al interior de la habitación presidencial.

—Pero ¿Y la primera dama?— Me sentí sucio al preguntar.

—Algunas noches lo acompaña, pero tengo entendido qué nunca se queda toda la noche.

Finalmente vi la habitación: un cuarto enorme con paredes de tres metros de altura, todo recubierto de cráneos, solo dejando algunos espacios vacios a la altura del techo, la cama matrimonial estaba justo al centro y todas las cuencas vacías miraban al centro, directamente al lecho presidencial.

—Lo hizo. —Dijo mi cuñado. —En campaña juró qué se haría responsable de todas las muertes causadas en su lucha por la paz y la prosperidad. ¡Dijo qué pondría los cráneos de sus víctimas sobre su cama! —Extendió sus brazos admirando la obscena obra qué estaba ayudando a crear. —Y realmente duerme aquí.

—Muchos de ellos no merecían morir. —Me atreví a decir.

—El nunca prometió qué los castigos serían justos.

—¡Pero el todavía no era presidente cuando los manifestantes del autobús! —Mi cuñado me empujó hacia la cama. Había dos cráneos, uno en cada poste de la cabecera. Entonces lo noté:

La placa en la cabecera decía “Alborotadores”  Las cuatro paredes estaban cubiertas a diferentes alturas y en la base de los muros había pequeñas señales separando grupos de osamentas.

—¡Los cataloga! —Dije con un hilo de voz.

Mi cuñado sonrió con orgullo.

—Sí, allí están los ladrones, asesinos y criminales de poca monta, en el muro de la puerta están los negligentes, evasores de impuestos y criminales ecológicos, allá están los políticos corruptos, líderes de oposición y los conspiradores, en aquel bloque de la salida se encuentran los estafadores y criminales de cuello blanco.

—¿Y la cúpula? —Pregunté con la boca seca mientras dejaba caer el cuchillo qué escondía mi sudadera. Dos miembros del personal de seguridad se acercaban hacia mí, me pregunté qué pasaría con Clarissa cuando me ejecutaran, posiblemente consiguiera un buen empleo, todos consiguen un buen empleo en este país, aunque sus maridos sean ejecutados.

—Esa es para los inocentes. —Respondió mi cuñado.

La Arpía

El jefe se estaba tirando plumas.

Comenzó un miércoles del año pasado, Anita de compras acaba de desaparecer y yo arrancaba un cabello sumamente incomodo de mi nariz, el jefe pasó detrás de mí y vi caer una pequeña pluma gris sobre mi monitor, a pesar de que la oficina tiene las ventanas completamente selladas y el aire acondicionado está en funcionamiento perpetuo, achaqué la aparición al paso de algún ave extraviada por nuestra oficina.

Pero cada día comenzaron a aparecer más.

Las plumas comenzaron a incomodarme, estaban en los cajones, el garrafón de agua, las ventilas del mini-split, la copiadora y el CPU de la computadora, pero uno aprende a adaptarse a las condiciones adversas del trabajo.

Fingimos que no caen decenas de plumas cada vez que mi jefe se acomodaba el traje, ignoramos los extraños cacareos que surgían cuando las juntas se ponían tensas, cambiamos las papeleras por botes de doble tapa para depositar todas las plumas que se acumulan en el piso de la oficina.

Un día todo el ambiente se sintió extrañamente limpio, nos enfocamos tanto en ignorar las plumas, que cuando dejaron de aparecer no lo notamos. Continuamos así por un buen rato.

Al año siguiente la molestia regresó, pero exceptuando por los nuevos empleados todo el personal ya estaba habituado a lidiar con las plumas, o eso creí hasta que desapareció Lorena de sistemas, tal vez debimos sospechar algo, en los trabajos de oficina las desapariciones son comunes.

El tema de las plumas era tan tabú que nadie hiso alguna correlación entre el extraño fenómeno y algún compañero desaparecido… bueno… todos los años se va gente sin despedirse, hacemos correr algún rumor y seguimos con nuestro trabajo.

Lo extraño de Lorena es que jamás vino por sus utilidades y prefiero que sea así.

La gente dice que se peleó con Cristina de costos y no pueden verse, otros dicen que se fugó con su amante el surfista japonés y los más aventureros dicen que le estafó novecientos dólares a la empresa y huyó a Belice a vivir en una choza frente al mar.

Pero yo la vi en el comedor de empleados, no era el horario de comida pero ¿Quién iba a descubrir si me quedaba allí media hora? ¡Ojalá no hubiera hecho! Yo lo vi:

Colgando como una máscara de día de brujas fabricada en látex, la piel y el traje de mi jefe colgaban del perchero, un ave de forma antropomórfica, con el cuello alargado, plumaje gris sucio, y un pico retráctil, arrancaba pedazos de carne del cuerpo inerte de Lorena, el pájaro me vio con sus cuencas vacías y yo me disculpé antes de regresar a mi cubículo.

La arpía es una creatura mitad ave mitad humano originaria de las islas helénicas, este pájaro cuenta con ciclos reproductivos esporádicos, pico retráctil, plumajes que van del gris claro al negro y ojos cuatro veces más pequeños que sus cuencas.

Suelen decorar con huesos y materiales brillantes sus nidos, los cuales se encuentran perfectamente ordenados de la manera más simétrica posible. Se alimentan solo una vez al año y lo hacen de carne humana días antes de mudar de plumas.

Su comportamiento antisocial y gusto por el orden las hace sumamente llamativas para las operaciones burocráticas.

Pre-merito

Todos los varones a la edad de doce años deberán realizar las cinco pruebas, aquellos que no logren pasar ninguna de ellas: serán castrados.

Te explican que no hay ningún problema si fallas las cinco pruebas; puedes trabajar, crecer, tener relaciones sexuales, ganar dinero y llegar muy lejos. Incluso puedes adoptar a niño, todos podemos adoptar a un niño. Siempre hay un asesor social que te explica las ventajas fiscales y sociales de la castración voluntaria, los niños que acepten no tienen que realizar las pruebas, además al cumplir los dieciocho te dan un vale por nueve mil dólares, no es la gran cosa: dicen tus padres, aun así ellos nunca han tenido esa cantidad de dinero. Te dan muchos ejemplos sobre personajes importantes y famosos que fueron castrados a los doce años: Deportistas, políticos, militares, artistas y hombres de negocios. Se supone que tus padres no pueden influir en tu decisión, tienen prohibido obligarte a tomar las pruebas, aun así muchos de ellos inscriben a sus  hijos a cursos especiales para pasar los exámenes. En el pueblo no está bien visto que alguien acepte el bono, el pastor dice que es contra los deseos de Dios y la mayoría de los desertores son expulsados de la comuna, dicen que al final les va bien.

Parada frente al pizarrón del grupo está Hilda, tiene la edad de mi hermana mayor, veinte años a lo mucho, todas las chicas del salón de clases tienen la hora libre, en el grupo solo hay varones, se nota que ya está acostumbrada a dar esta charla. ¿Me pregunto a cuántos grupos habrá visitado antes de nosotros?

—La primera prueba es la de habilidad lingüística, muchos chicos creen qué saber varios idiomas te garantiza aprobar, en realidad solo es una especie de indicador.— Hilda sonríe con un gesto mecánico, para ella nosotros somos otra comuna más, mañana dará la misma platica a otros ocho grupos.— Lo que en realidad hace la prueba es evaluar su habilidad para aprender idiomas, hablar en público y convencer a otras personas. Los chicos que pasen estas pruebas van directo al instituto Salinas de Transacciones y Astucia, ustedes ya deben saber que nuestro presidente estudió allí, también el vicepresidente y muchos de los líderes que llevan a nuestra nación por el camino de la prosperidad.—

El pastor dice que nosotros somos prósperos en Cristo, si tienes todo lo que necesitas y un poco más para emergencias, eres prospero. Yo nunca he sabido que al país le falte algo, de lo que sí sé es que en la ciudad hay gente que tiene mucho más que nosotros, el pastor dice que no necesitas zapatos nuevos aunque los tuyos tengan agujeros, pero mira a Hilda: Usa tacones negro brillante sin el menor desgaste, cuando llegó nadie podía dejar de verla, ninguna mujer en la comuna luce como ella, simplemente es porque tiene más que nosotros.

—La segunda prueba es la motriz fisicodeportiva,— Todos volteamos a ver  Antonio, es más grande, más fuerte y el más rápido de todos nosotros— en esta prueba detectamos a los grandes deportistas de nuestra nación, si pasan esta prueba realizaran otras posteriores para ser colocados en la institución deportiva más adecuada a sus capacidades. No importa si no pasan esta prueba, hay muchos deportistas importantes que han sido desactivados, ya sea por elección propia o por fallar la prueba. —Un asistente repartió folletos de un colegio deportivo privado, ya los conocíamos, si aceptas la castración voluntaria ellos te dan la beca completa y cuando cumples los dieciocho todavía te quedan dos mil dólares para ti.

Hilda sigue hablando de las diferentes pruebas: La lógica-Matemática para los chicos que puedan ser ingenieros o matemáticos, la estratégica disciplinaria para los futuros soldados del país y la ecológica-adaptativa para los futuros exploradores espaciales.

Al final no importa, tus padres, la comuna y el pastor quieren que hagas la prueba, les importa un comino que no conozcas a nadie que haya pasado, ellos solo saben que tu madre quiere nietos, probablemente a mi padre le vale una mierda el tampoco pasó la prueba. Ojalá el hijo de Cyntia hubiera sobrevivido, madre dejaría de ponerme atención y yo me largaría de la comuna con mis 9000 dólares.

La novia del Huracán

Me tardé un par de años en darme cuenta, supongo que lo hubiera esperado de una meteoróloga profesional o de una bióloga marina, pero Edith era una contadora que trabajaba ocho horas diarias en un edificio con aire acondicionado.  Tal vez si hubiera puesto más atención, o si no hubiera intentado aprovecharme de la situación…

La primera pista fue cuando estábamos en un restaurante y en la tv pasaban una noticia sobre el huracán patricia. En la ciudad había una paranoia generalizada y me ofrecí a acompañarla a su departamento, durante todo el trayecto ella no dejó de ver noticias sobre el huracán en su teléfono, y cuando llegamos a su puerta me ofreció pasar.

En el estante había varios libros de meteorología que en ese momento no noté, mi amiga se había abalanzado sobre mí con una lujuria que consideraba incapaz de ella, y en lugar de poner atención a sus libros; yo estaba ocupado con su trasero en mi cara. Cuando terminamos nos quedamos desnudos en el sillón de la sala mientras la llovizna golpeaba la ventana. Se notaba algo de tristeza en su rostro.

Su frialdad posterior debió servir para que me alejara, en lugar de eso traté de acercarme a más ella, la busqué y supliqué, pedí disculpas por mi comportamiento en su apartamento y ella me aceptó. Pero seguía siendo fría, indiferente, similar a quien acepta un destino después de que sus sueños mueren.

Me sentí en la relación equivocada, hasta la siguiente temporada de lluvias.

El huracán Ramona había llegado a la ciudad, yo había mantenido a Edith a mi lado a base del canal del clima y regalarle libros de meteorología, pero aquella noche la tormenta impactó de lleno a mi departamento, con una dulzura inusual salimos a mi balcón y dejamos que la lluvia torrencial golpeara nuestros cuerpos. El agua y el granizo nos azotaban  impiadosamente, Ella estaba tan feliz, tan cómoda bajo la lluvia y tan llena de vida. Lo entendía perfectamente, si quería hacerla feliz debía estar donde las tormentas.

Ojalá nunca lo hubiera entendido.

Cyclone_Catarina_from_the_ISS_on_March_26_2004

Aquí estábamos, ha pasado un año desde que entendí cómo hacerla feliz. Rentamos una casa junto a la costa y el Huracán Selma ha alcanzado la categoría cinco. Edith no hablaba: sonreía y jadeaba, solo se movía para cambiar  de ventana y lo único que comía era el agua con azúcar que le llevaba a la boca. Había perdido por lo menos cuatro kilos desde que le dije que rentaríamos una casa en la playa durante la temporada de huracanes, y le ha crecido todo el pelo. Su piel se notaba más pálida, sus pecas habían desaparecido, sus ojos color azul se habían opacado hasta parecer dos aceitunas verdes, sus labios estaban pálidos y su blusa blanca al mojarse transparentaba sus costillas.

Lucia tan feliz, era como si su propio cuerpo y mente fueran tan plenos que habían olvidado todo lo demás, no opuso resistencia mientras le ponía el impermeable amarillo y cuando entendió que la llevaba a un bote, sus dedos se clavaron en mi brazo de la emoción, había una locura inédita en sus ojos, la sonrisa incrustada en su rostro… y… ella era tan frágil.

Tal vez ese era su destino, y me utilizó.

El huracán era impresionante, el bote se agitaba con las olas del picado mar, pero ella mantenía el equilibrio a la perfección. Sin su impermeable me di cuenta de mi propia estupidez, ¿Cuánto hacía que no comía? ¿Alguna vez la hice feliz sin la ayuda de una tormenta tropical? ¿Cómo pretendía hacer que el bote regresara al puerto?

—Gracias.— Me dijo con un susurro que se antepuso sobre los alaridos del viento, el mar y el acero rompiéndose. Me dió un beso, más dulce que el néctar y más tierno que cien cachorrillos bebé.

Frágil, sólo vestida con unos jeans y una blusa blanca, caminó hasta la proa y se arrojó al océano.

Ella no sabía nadar.

Nadie la buscó, nadie me preguntó por ella…

Lo único que dejó atrás fue a mí.

Deidades binarias (parte III)

En su vida había sido más atractiva. La gente del canal le había maquillado el cuerpo completo, le arreglaron el cabello y le habían facilitado un bikini negro de dos piezas. Ganar $10,000, comprar un departamento y demostrar que no necesita al banco ni viajar a ningún asteroide. Era un día especial.

Salió a los reflectores, se concentro en sonreír mientras el presentador animaba al público.

—¡Hola preciosa! ¿Cómo te llamas cariño?— Preguntó el presentador con tono optimista.

—Sofía— Sonrió y saludó a la cámara, a las chicas coquetas les tocan pruebas más fáciles.

—¿Y desde donde nos visitas?—

—Tampico— El calor de los reflectores le quemaba el rostro, pero la espalda estaba congelada. Se preguntó si siempre seria así en tv.

—¡Vienes del trópico mexicano! ¿Le regalarías una vuelta a nuestro público?—

Era la primera vez que Sofía utilizaba tan poca ropa, en ese momento deseó que no le hubieran cortado el pelo a la altura del mentón, mientras giraba sobre sus talones hizo un esfuerzo para conservar la sonrisa a pesar de sentirse tan vulnerable.

—¡Muy bien Sofí! ¿Te puedo decir sofí?— Apenas asintió. —Antes de comenzar déjame ponerte este regalo de los patrocinadores.—Le colocó una tira de plástico negro en el cuello, al contacto la pieza se encogió hasta tomar la forma exacta de su cuello, ni una decima de milímetro más amplia. —Es un collar de control DURSEX. «DURSEX Lo mejor en pre-necrofilia.»— Un parte de su subconsciente le hizo notar la relación entre ese collar y el corte de pelo que había recibido.— La prueba del día de hoy es muy sencilla, te vamos a introducir en aquel péndulo de cristal, por cada oscilación que haga el péndulo, tu recibirás una descarga eléctrica mayor.— Sofía levantó la vista, el aparato colgaba a tres metros de su cabeza.

—De cristal transparente para no desperdiciar el bikini nuevo.— Dijo la voz en su cabeza.

—¿Ya conoces Neo-Fer?— El conductor del programa había dicho algo importante mientras miraba el péndulo.— Neo-Fer es nuestra estrella invitada el día de hoy, y mientras tu estés en ese péndulo, el contestará mis preguntas, por cada acierto tú ganarás $10,000. —Cuando ya no aguantes la descarga, solo grita: ¡DURSEX!—

Diez mil era todo lo que Sofía necesitaba, le ofrecieron el departamento al uno por ciento de su valor creyendo que no conseguiría el capital, si compraba el departamento al contado no habría deuda, sin duda habría libertad y con libertad podría quedarse en la tierra para siempre.

El péndulo estaba frio al contacto, pero aún no había comenzado la prueba cuando el calor era sofocante, la habían sujetado de las muñecas y los talones, completamente estiradas sus extremidades, el aparato de tortura comenzó a oscilar y notó que una cámara la seguía enfocada en su rostro.—Más bien en tus pechos.— Le gritó su subconsciente.

El plan era sonreír mientras permanecía en el péndulo, resultó imposible cuando la electricidad comenzó a atravesar su cuerpo, perdió la cuenta después de la tercera oscilación, su estomago quería devolver y el dolor le impedía recordar la palabra de seguridad.

El péndulo se detuvo y la descarga cesó.

—Fantástico Neo-Fer, has contestado correctamente las diez preguntas sin fallar ni una sola, eso deja a Sofí con $100,000.— El subconsciente guardaba silencio, tal vez había muerto electrocutado, o muy posiblemente desconfiara de la buena noticia.— Muy bien Neo-Fer ¿Quieres contestar una última pregunta por el doble o nada?—

El rapero asintió lleno de confianza. Eso molestó al subconsciente.

—¿Cual es la densidad del benceno a 35°C—

—¿Qué?—

Sabiéndose en lo correcto el subconsciente le hizo notar que se había orinado adentro del péndulo.

—Lo sentimos Sofí, pero hoy no te vas con las manos vacías, te llevas este kit de regalos cortesía de DURSEX «DURSEX Lo mejor en pre-necrofilia.»—

Sofía abandonó el estudio en silencio, una cámara le estaba enfocando el trasero, pero repentinamente ya no paresia tan humillante.

Deidades Binarias (parte I)

Sergio abrió el buzón aunque el edificio estaba abandonado el mantenía el registro de por lo menos cuatro personas habitando. Hacía años que la ciudad estaba semivacía, la mayoría de los habitantes abordó  las naves rumbo al cinturón de asteroides, las estadísticas más optimistas aseguran que un 25% de los pasajeros sobrevive, aún así miles de personas solicitan su ticket con la esperanza de una vida mejor y el perdón de sus deudas.

—El correo de este mes dice que tengo pre-aprobado un préstamo por 5000 dólares, fabricar esta publicidad les cuesta $3000.— El hombre hablaba al vacio, le deprimía saber que algún pobre diablo aceptaría la limosna que ofrecía la tarjeta digital terminaría pagando con creces toda la publicidad. —Costo anual total del 72,403% la más baja del mercado…— Susurro Sergio.

Desarmador en mano desmanteló los cuatro folletos publicitarios y retiró los componentes electrónicos, pronto terminaría la biblioteca y podría abandonar este mundo tranquilo. —Solo me falta el bibliotecario, no importa que no sepa de libros, o que no quiera hacerlo, ya casi he transcrito todos los textos sagrados a digital y cuando el señor de la noche se haya actualizado podremos enviarlo incluso a las colonias del cinturón de asteroides—

Cuatro cuadras más abajo el joven Elisai recién cumplía los dieciocho, le acababa de llegar su confirmación de mayoría de edad junto con la primera publicidad del banco, $3800 dólares para su juerga de cumpleaños y luego por el ticket a las minas del cinturón.

El paraíso de los artistas incomprendidos

El gobierno de Tumbaburrul fue el pionero en promoción artística y cultural. Con la apertura del plan municipal para el desarrollo de las bellas y no tan feas artes, todos los artistas alojados en el municipio sureño recibieron un subsidio mensual para permanecer practicando su oficio.

Durante los primeros meses la economía de Tumbaburrul recibió un saludable impulso, puesto que el sector turístico y de bienes raíces presentaron ingresos 450% mayores a los años anteriores. Esto se debe a las personas interesadas en conocer las diversas presentaciones de artistas callejeros que ahora ejecutaban libremente y el aumento de inmigrantes interesados en el programa de becas y subsidios.

A pesar del incremento económico generado por el plan, el municipio ha solicitado un crédito para comienzos del segundo año. El número de artistas becados ha aumentado de 70 a 358 en solo un año, pero el gobierno local asegura que la economía recuperará su brío en cuanto los primeros artistas becados logren vender sus obras y reinviertan sus ganancias en el proyecto.

Después de dos años y medio de programa, el principal promotor del proyecto: El Alcalde Leonardo Menchaca fue acusado de un fraude. Numerosos familiares y amigos cercanos, recibían becas de artistas sin haber presentado avance alguno en el desarrollo cultural del municipio. La principal denunciante del fraude: Adriana Díaz (Líder del sindicato de Artistas Plásticos), retiró las acusaciones después de que se demostrará que ella tampoco había presentado una sola pintura o escultura en 29 meses de beca continúa.

En su cuarto año de operación el gobierno de Tumbaburrul recibe su sexto apoyo federal para la incubadora de grandes artistas. Un alto porcentaje de la población nacional se opone al nuevo apoyo, el municipio es considerado incluso por varios artistas nacionales como un elefante blanco.

El escándalo regresa al municipio incubadora: Después de 50 meses de beca la pintora Allegra Luna ha vendido una colección de cuadros  a un cliente no gubernamental(Los gobiernos son los principales clientes de la incubadora). En lugar de reinvertir en el proyecto de incubadora la artista ha decidido mudarse a Nueva York y renunciar a su apoyo municipal. Este no es el único caso de artistas que se aprovechan el programa sin devolver dinero una vez obtenido el éxito; solo cuatro meses antes Marco «El Chacal» Demara (cineasta experimental) renunció a la incubadora en cuanto se le autorizó un crédito de un millón de dólares para realizar un cortometraje.

Un mes antes del plebiscito extraordinario que se realizará para decidir si el programa será cancelado, el actor y director teatral Benjamín Rivera estrenó su mega producción con la cual promete recaudar suficiente dinero como para independizar la incubadora de los apoyos internacionales. Nuevamente el debate se exacerbó cuando la esperada obra teatral consistió en ver al director de la obra y único actor recostado en una cama mientras jugaba con gameboy primera generación. La presentación, destrozada por la crítica y el público en general; ha cancelado todas sus funciones, dejando completamente sin uso el teatro central de Tumbaburrul.

Con un PIB calculado en números negativos; el municipio de Tumbaburrul finalmente ha cancelado su plan municipal para el desarrollo de las bellas artes y los programas relacionados. Ya sin becas ni subsidios para artistas el municipio ha perdido el 74% de sus habitantes, generando otra serie de problemas de seguridad e infraestructura. Se considera que algunas instalaciones como Teatros y estudios de cine serán donados a algunos estudios extranjeros con la intención de reactivar la economía. Mientras tanto, muchos artistas denuncian la confiscación de sus obras e instrumentos durante el proceso de cierre de talleres. Las autoridades aseguran que los procedimientos fueron los legales, puesto que en el último contrato de beca; los artistas cedieron los derechos de su trabajo, así como como las herramientas adquiridas y obras creadas dentro del municipio…

 

Nota del cerdo:

¿Les gustó el cuento? ¿Sabían que todos los personajes tienen nombre de personas de la vida real?

La gente que está suscrita a nuestras redes sociales tiene la oportunidad de participar en numerosas dinámicas donde hay premios como: Aparecer en mis cuentos, textos en papel personalizados y vacaciones en Cuba*. Así que no olviden suscribirte a nuestro Facebook y puedes seguirme en twitter. Habrá más dinámicas pronto. No olviden comentar y compartir.

*Las vacaciones en Cuba son una cruel y descarada mentira.

Frulación parte II

Para leer la parte uno: AQUÍ

Me despierto de noche, no quedan rastros de la fiesta y tengo un hambre del demonio. Un mayordomo me espera con una toalla y un sándwich, ya en un estado más presentable, soy conducido a una de las habitaciones donde me espera Daniela.

Tiene una mirada que taladra el alma y entre sus manos hay una lanza ceremonial de la tribu Mandika. Yo no tengo miedo, por más afilada que esté la lanza es muy difícil temerle a una chica de un metro cincuenta y ocho centímetros con un pijama de estampado de borreguitos.lanza Zulu llamada Assegai

-Dame un motivo para no matarte.- Me dice Daniela con una voz saturada de frulación.

-Me gusta vivir.- Dije no muy convencido.

-Seis docenas de ricahones lujuriosos. Les entrego a tú chica en bandeja de plata ¿y sabes que hacen?-

A pesar del entumecimiento mental, se me ocurrieron una serie de respuestas ingeniosas. Todas interrumpidas por el instinto natural de esquivar lanzas que se dirigen a mi cara.

-Se rinden porque la niña declina una proposición.- La chica comenzó a buscar algo entre los cojines de su sillón, con rostro triunfal sacó una botella de vino y se sirvió en una copa que estaba arrumbada sobre la alfombra. –Pero tú no sabes de que estoy hablando ¿Verdad? Por su puesto que no, eres un peón en juego de ajedrez con dados.-

Una copa de vino se estrelló en mi pecho.

-Ely, la Perfecta Elisabeth, la que luce bien en vestido de noche y con overol de mecánico. En cuanto entró a la casa de mi tía Mirna debieron cambiarla por un varón, pero de alguna manera se hizo amiga del súcubo avejentado. Solo ha pasado seis meses en la ciudad y ya se ganó a mis amistades, contactos de negocios y enemigos. La bruja lujuriosa de mi tía la mandó a Yale. ¡Yale! Mi tía eligió a su heredera y no soy yo… ¡Quiero que mires lo que hay a tu alrededor! ¿Ves las pinturas? ¿Las pieles de oso? ¿La colección de armas? ¡Esto no es dinero! ¡Lo que tiene Mirna es dinero! Y un día aparece esta chica de la nada y se comienza a ganar a mi familia.-

En algún punto del monologo  me di cuenta de que no quedaba frulación en mi cuerpo. También mi instinto de huir está ausente y un olor sospechoso emana de mis pantalones. ¿Exactamente cuánto tiempo estuve drogado?

-Cuatro días.- Me comenta Daniela mientras saca una katana oculta debajo de una alfombra, la desprecia y continúa con su búsqueda.

-¿He dicho eso en voz alta?-

-Sí, no has eliminado totalmente los narcóticos de tu organismo. ¿Sabes? no soy una mala persona. Simplemente no puede existir una chica tan perfecta sin esconder algo. Y ella ha confirmado mis sospechas, todo su pasado está basado en mentiras y verdades a medias. Desde su pueblo natal en Escocia, la información que dio para solicitar la beca y los estudios de intercambio. No es dinero, eso te lo aseguro. A mí me interesa el dinero, lo cual desde muchos puntos de vista es una motivación valida y noble. Pero esa niña bonita busca algo diferente. La rodee de ricachones solteros y no le interesó ninguno… Ni siquiera quería fiesta de despedida, allí es donde entrabas tu querido, cuando supo que vendrías ¡incluso le preocupó que ropa iba a ponerse! Nunca había visto a esa mujer dudar de su imagen.-

En este punto tengo que aceptar que mi ego masculino y otras cosas se ensancharon repentinamente…

-Sigues pensando en voz alta galán.- Dice Daniela mientras inspecciona algunos rifles para cacería de elefantes. –Si tuvieras algunos miles millones apuesto a que “Señorita Perfecta” -lo dice con una voz y una mueca característica de las adolescentes enojadas- habría dejado a mi herencia en paz y ahora yo podría estar viendo BBC con toda calma.-

-Créeme que si por mí fuera, te la quitaba de encima. Pero no tengo idea de sonde conseguir tanto dinero.-

-Te equivocas.- Daniela encontró una daga a su gusto y ahora se acerca cual pantera en pijama de borreguitos, apuntando directamente a mi cuello. -Es mi pijama favorita, cómoda y con bolsillos en los pantalones. Te sonará raro pero cuando llevas mi ritmo de vida los bolsillos son parte vital de tu rutina diaria. ¿Y por qué estas narrando lo que sucede? Por otro lado, me has dado una buena idea, solo necesitamos que ganes algunos millones y te la llevas muy lejos de mí. Todos ganan; Ely consigue el dinero y su hombre, tú te quedas con la chica y yo con la herencia de Mirna.-

Dejó de apuntarme con la daga y pone su mano en mi hombro.

-Ahora amigo ¿Cómo te llamas y que sabes hacer?-

Villanía del martillo.

-¿Sabes?- Dijo la voz con algo de cinismo.-Si Héctor hubiera derrotado a Aquiles probablemente tú y yo no estaríamos aquí. Pero supongo que culpar al asedio de Troya de tus problemas actuales no es algo que hagan los caballeros ¿Verdad?- La cínica voz oculta en la obscuridad cambio de posición mientras el héroe trataba de liberarse de las cadenas.

-La caída de Troya fue el inicio del mundo moderno ¿No es así? Fue cuando la gente comprendió que era injusto que un hombre que tuviera todas las ventajas se cubriera con gloria. Con esto las cargas con inferioridad numérica, los hombres con honor en la guerra, invadir Rusia en invierno y muchas otras proezas de estupidez heroica fueron realizadas. Igual que la tuya.

Y eso no ayudó a nadie, tampoco ayudaron las religiones con su promesa de recompensas post mortem o batman con su pretenciosa manera de resolver las cosas. Dime ¿Realmente crees que Batman puede ganarle a Superman? El dinero y la inteligencia son escasas, pero no compiten con el poder de un dios. Y yo pretendo ser el nuevo Dios.

Mientras tú tenías ventajas físicas que no te voy a negar, yo decidí que las reglas no aplican a mí. ¡Mírate! encadenado cual animal. Oh cierto, te saqué los ojos. Es irrelevante…

Tú querías una pelea justa y yo quería ganar, desperdiciaste tus ventajas para mostrar empatía por aquellos lastrados por su mediocridad. Seres débiles e inútiles que me glorificaran por derrotar al superhombre con todo en contra. Mentes que olvidarán que tú en realidad queras ser el héroe.

En fin… Supongo que deseas saber cuál era mi plan. Pero yo necesito demostrarle nada a nadie, por lo tanto te mataré para evitarme correr algún riesgo.-

El martillo destruyó la cabeza.